Freddie Mercury

Freddie Mercury

martes, 1 de noviembre de 2011

¿QUIÉN FUE REALMENTE FARROKH BULSARA? FREDDIE MERCURY, TODO UN PERSONAJE


Farroch Bulsara o Freddie Mercury, genio y figura hasta la sepultura, reconocido por sus cambios de look, sus presentaciones extrafalarias y voz singular definitivamente marcó una diferencia en el ámbito musical. Pero nos preguntamos, ¿quién fue Freddie Mercury? ¿Cómo llego Farroch Bulsara a convertirse en este personaje histriónico?
Durante toda su vida Farroch estuvo interesado en el arte. En la escuela aprendió a tocar piano y cuando llegó a la adolescencia buscó pertenecer a una banda[1] ¿Se esconderá detrás de esta búsqueda el deseo de ser mirado? En una ocasión fue entrevistado por Rudi Dolezal[2], quien le preguntó que canciones utilizaría para desnudarse, Freddie contestó: “Todas las que he escrito, ¡Vamos!”.

A los 20 mostró gran interés por la ilustración gráfica durante sus estudios en la Escuela de Arte Ealing[3]. Influenciado fuertemente por Jimi Hendrix, lo tomó como motivo de decoración para su habitación con dibujos e ilustraciones hechos por él.

Mercury aseguró ser una persona extrovertida en el escenario, mostraba diferentes facetas de su personalidad, incluso a través de su vestuario: era su válvula de escape. El cambio de nombre le dio otra piel. Consideraba que el nombre Freddie Mercury tenía poder. Reina con bigote en sánscrito. ¿Tendrá esto algo que ver con la figura de la madre o sólo con la necesidad de ser visto?

Y es que su necesidad de cambiar era, indudablemente, algo definitivo. “Odio hacer lo mismo todo el tiempo. Me gusta ver lo que está sucediendo en este momento de la música, el cine y el teatro e incorporarlo” llegó a decir alguna vez.

En otra ocasión reconoció que no tocaba la guitarra en los conciertos y presentaciones de la banda porque prefería estar moviéndose en el escenario, animando a la audiencia solo usaba un piano de cola larga cuando deseaba complementar su escenografía.

¿A qué apunta todo esto?  ¿A una psicosis? ¿A una neurosis de tendencia histérica?




[1] S.A (2006) .Freddie Mercury. Recuperado el 26 de octubre de 2011 de: http://www.todomusica.org/freddie_mercury/.
[2] Entrevista con Rudi Dolezal.
[3] S.A (2006) .Freddie Mercury. Recuperado el 26 de octubre de 2011 de: http://www.todomusica.org/freddie_mercury/.

¿HISTERIA?


“Al.: Hysterie. Fr.: hystérie. Ing.: hysteria. It.: isteriz. o isterismo. Por.: histeria. Clase de neurosis que ofrece cuadros clínicos muy variados. Las dos formas sintomatológicas mejor aisladas son la histeria de conversión, en la cual el conflicto psíquico se simboliza en los más diversos síntomas corporales, paroxísticos (ejemplo: crisis emocional con teatralidad…)”[1]

¿Suena familiar? ¿Podemos ver a este ídolo reflejado en esto?

Sólo podemos guiarnos por su obra musical y lo que ésta representó y sigue representando, esto se puede tomar como un significante…Podemos decir que Farrokh fue su música, su obra. La música siempre fue parte de él, más aún, él fue parte de la música, él es su música; esto lo profundizaremos un poco más adelante. Las respuestas a estas preguntas nunca las sabremos con certeza, sólo tenemos nuestras hipótesis y las pistas que nos ha dejado, aquellos pasos que pintaron huellas de colores, de tonos musicales enmarcados en silencios que podían ser callados ni a gritos y que nos indican que posiblemente este músico tuvo un Trastorno Histriónico de la Personalidad:


“Son personas vivaces, teatrales, de comportamiento exagerado y son percibidos por los demás como centrados en sí mismos y de emociones superficiales y exageradas. Su forma de vestir puede ser elaborada y vistosa, pensada para llamar la atención de los demás.”[2]


Esto se mostraba cuando buscaba llamar la atención, llenar el vacío, cuando cargaba de emocionalidad sus canciones que con el paso del tiempo se convirtieron en himnos para una generación, en los momentos que su personalidad teatral se evidenciaba y con los mismos cambios excesivos de looks y vestuario.


“Tienden a idealizar a la persona amada al inicio de la relación, y a sentirse frustrados después. Sus relaciones suelen tener un principio idílico pero un final desastroso, o bien mantienen relaciones tormentosas con finales dramáticos.”[3]

“You can have everything in the world and still be the loneliest man. And that is the most bitter type of loneliness, success has brought me world idolization and millions of pounds. But it's prevented me from having the one thing we all need: A loving, ongoing relationship".
Freddie Mercury (1985)


Freddie Mercury, Farrokh Bulsara, como lo queramos llamar, no buscaba encajar sino sobresalir, aprovechó su talento y marcó una huella imborrable.


La música puede nombrar lo innombrable, si prestamos atención podemos escucharla en todas partes, en el viento cuando sopla trayendo algo de un sitio lejano, en la luz cuando atraviesa una ventana, está alrededor de nosotros, todo lo que tenemos que hacer es abrirnos a ella, todo lo que tenemos que hacer es escuchar… Porque la verdadera música es el silencio y todas las notas no hacen más que enmarcar ese silencio.[4]

“I’m just a musical prostitute, my dear”



[1] Histeria o Histerismo. Recuperado el 26 de octubre de 2011 de: http://www.tuanalista.com/Diccionario-Psicoanalisis/5556/Histeria-o-histerismo-pag.2.htm.
[2] Trastorno Histriónico de la personalidad. Recuperado el 26 de octubre de 2011 de: http://www.cepvi.com/articulos/personalidad_histrionica.shtml
[3] Trastorno Histriónico de la personalidad. Recuperado el 26 de octubre de 2011 de: http://www.cepvi.com/articulos/personalidad_histrionica.shtml
[4] Bassols, M (2010). Cinco variaciones sobre In a silent way. Polifonías en Psicoanálisis. Caracas, Venezuela: Pomaire.

¿CERTEZA o CONTRADICCIÓN?

  • Una revolución de la cultura del rock.
  • Una influencia significativa en el mundo de la música.
  • Una denuncia a los regímenes políticos y raciales de la época.
  • Una grandeza inmensurable que dio y sigue dando mucho de qué hablar.
  • Una inmortalidad, un legado.

Nos atrevemos a decir que tenemos la certeza de que todas estas afirmaciones son realmente así, es una realidad innegable. Nos basamos en nuestras percepciones a través de su música y lo que eso significó para el mundo. Sin embargo, ¿no es esta significación, de carácter subjetivo? Lo que Mercury compuso, lo que Mercury presentó en el escenario, lo que Mercury fue como artista, representa, como bien dice Lacan[1], un significante para cada persona, la cual juzga de manera subjetiva todo lo que lo rodea y proyectará en el artista aspectos propios de sí mismo, y/o en otra instancia, incluirá aspectos propios del artista como parte de sí mismo. Sin embargo, esta certeza de nuestra interrogante, es una síntesis a través de una realidad objetiva, sin negar el componente subjetivo que esto representa; no como los psicóticos que sufren de certezas subjetivas de ideas falsas, que no se modifican con la argumentación lógica[2]. Entonces sí, es una certeza para nosotros y para muchos, que Freddie Mercury fue una leyenda en todo sentido.

Cualquiera que naciera en la isla de Zanzíbar o la “Costa de negros”[3], pudiera esperarse que se rigiera bajo un sistema de discriminación racial, que debemos destacar que era imperante en la época; sin embargo, Freddie al parecer, no se interesó por los temas políticos ni económicos, sino que centró su atención en el arte. Carecemos de información suficiente para determinar qué lo movió a engendrarse como artista, qué aspectos de su vida (sobre todo de la infancia) pudieron influir en su música, o simplemente dar un diagnóstico de su perfil psicológico; aún así, sus composiciones, su actuación en el escenario y su actitud durante la adultez, nos permiten indagar sobre lo que fue Freddie Mercury, lo que fue Farrokh Bulsara, y lo que sigue siendo.

A partir de esta premisa, no hay información relevante acerca del padre de Freddie, al menos durante la mayor parte de su infancia fue criado por su tía y abuela; y con respecto a su madre, sabemos que dedicó varias de sus canciones a ella. Partimos del posible hecho que Freddie no se haya identificado con su padre, y aquí hacemos alusión al Edipo de Freud[4], pero al Edipo invertido, en el cual el niño, en este caso, no se hace sumiso al padre ni se identifica con él; quebrando así esta ley reguladora del deseo. ¿Entonces, es posible explicar la sexualidad de Freddie Mercury a partir de esto? Definitivamente, de esto NO tenemos certeza, pero como podemos inferir de lo dicho anteriormente, en el homosexual hay una ruptura en la relación con el padre, que no le permite identificarse con él, con esta función organizadora como lo llamó Lacan, de esta manera el sujeto se identifica con su madre y busca ser objeto de deseo de otro hombre.

Sin embargo, puede representar una contradicción en la propia vida de Freddie, el hecho de haber nacido en torno a una cultura rígida en cuanto a los cánones sexuales y la religión, y ser un total “desadaptado” como se consideró en aquella época, y como se podría seguir considerando en la actualidad, por las restricciones sociales.

Volviendo a nuestra interrogante, nos planteamos ¿qué es lo certero? y ¿Qué es contradictorio? Nos regimos por una serie de imposiciones de la sociedad, que muchas veces, las consideramos como nuestras, pero la verdad es que cada quien posee una interpretación subjetiva acerca de la realidad; y lo que es la realidad para mí, quizás o certeramente, no será lo mismo para otra persona. Este proceso no es tan simple como suena, está gobernado por múltiples mecanismos conscientes e inconscientes que lo regulan. De aquí, a que los expertos en la materia etiqueten a los sujetos de neuróticos, psicóticos, perversos, histéricos.

Poca información poseemos entonces, acerca de la infancia y vida privada de este personaje tan importante (en parte, porque se dice que detestaba a los periodistas e intentaba evadirlos o dar muy poca información acerca de sí mismo), para poder indagar sobre él y sus obras. Pero es que Freddie Mercury es su propia obra, como la interpretación subjetiva de su propia realidad, su composición y su actuación representan estos procesos inconscientes y conscientes, vías por las cuales se reprimen recuerdos (característico del neurótico) y se canaliza, se drena parte del inconsciente y aspectos no resueltos de su estructura mental[5].


[1] Fue un médico psiquiatra y psicoanalista francés, conocido por los aportes teóricos que hiciera al psicoanálisis basándose en la experiencia analítica y en la lectura de Freud, incorporando a su vez elementos del estructuralismo, de la lingüística estructural, de las matemáticas, y de la filosofía.
[2] Mingote, J. C., Del Pino, P., Huidobro, A., Gutiérrez, D., De Miguel, I. y Gálvez, M. (2008). El paciente que padece un trastorno psicótico en el trabajo: Diagnóstico y tratamiento. Med Segur Trab; Vol. LIII (208): 00-00.
[3] Puede que el nombre de Zanzíbar provenga del idioma persa زنگبار zangi-bar, que significa ‘Costa de los negros’. Véase también: Tanzania. Protectorado británico ubicado en la costa este de África Central.
[4] Estructura que organiza el devenir humano en torno a la diferencia de los sexos y de las generaciones De hecho, el complejo de Edipo adquiere toda su dimensión de concepto fundador cuando Freud lo articula con el complejo de castración: éste provoca la interiorización de la prohibición de los dos deseos edípicos (incesto materno y asesinato del padre) y abre el acceso a la cultura a través de la sumisión al padre y la identificación con él, que es el portador de la ley que regula el juego del deseo.
[5] Referencia a Anna O cuando inventó el término “talking cure” o “chimney swapping” (limpieza de chimenea) que lograba en la terapia con Freud, representaba para ella el drenar, el canalizar deseos y aspectos no resueltos de su Yo.

UN HIMNO DE VICTORIAS DEPORTIVAS


La famosa canción “We Are The Champions” tildada como la canción más pegajosa de la historia, se compuso (por Freddy Mercury) basándose en la respuesta del público. Uno de los integrantes de la banda Queen, Brian May, dijo que ellos deseaban que la audiencia cantara y se meciera a su ritmo, para obtener un resultado unificador y positivo[1]. “Se trata aquí de hacer existir al Otro como lector, como audiencia, en el interior de la propia obra, como parte fundamental de ella”[2]. Esto es la complementación de un ser con Otro significativo, que como plantea Lacan, este ser ubica su goce pulsional y busca ser objeto de deseo de ese Otro de la cultura.

Siguiendo esta línea, hacemos mención al concepto de Ready Made[3], como una manera de fundir los dos aspectos del Yo, la parte subjetiva y la parte objetiva, conformándose como partes de uno mismo. Este estilo de arte, que simplemente elegía un objeto y sin más ni menos, lo hacía una obra de arte; cuestionaba cuál era la naturaleza del arte en aquella época (siglo XX) y esto hace referencia a lo que fue la música de Freddy Mercury, y su obra en total, incluyendo sus presentaciones controversiales en el escenario; muchas hechas a manera de denuncia, de reacción ante lo que había sido el rock hasta entonces. Revolucionó, conjuntamente con su banda Queen, toda la cultura musical, siendo inspiración de múltiples artistas y géneros musicales. 


[2] Bassols, M. (2010). Polifonías en Psicoanálisis. Cap. 1, pp. 15. Caracas, Venezuela: Pomaire.
[3] Marcel Duchamp. Reacción contra el arte retiniano (arte visual vs. arte que se aprende desde la mente). Actividad meramente cognitiva.


NUEVO NOMBRE, NUEVA VIDA


Farrokh Bulsara y Freddie Mercury, pueden ser para nosotros el mismo hombre, aquel hombre que nació en uno de los lugares más recónditos de África Central, y que vivía su infancia con su familia.

“Como lo ha planteado Lacan, la cuestión de hacerse un nombre es lo que encontramos en la trama misma de muchas existencias…pero puede llegar a resultar eficaz en la batalla que el neurótico emprende para solucionar la angustia que la muerte suscita.”[1]. La mayoría de las personas considerarían algo bastante extraño el cambiarse el nombre natal, pues Freddie, llamado así inicialmente por sus amigos en el colegio St.Peter’s, no lo veía de la misma manera.

Al conocer al guitarrista Brian May y al baterista Roger Taylor, decidió entonces crear a la “Reina de la Música” Queen. Al componer la canción “My fairy King”, la cual decía en uno de sus versos: “Mother Mercury, Look what they’ve done to me” (Mamá Mercurio, mira lo que ellos me han hecho), fue cuando finalmente se dispuso a dejar a Farrokh Bulsara en el pasado y encarnar al hombre que cambiaría al mundo, Freddie Mercury; para él, sinónimo de poderío.

Si bien para nosotros sería algo irrelevante cambiarnos el nombre para alguna finalidad funcional, para Mercury fue un determinante en su vida, un punto de quiebre, y por lo tanto, un punto de inicio de algo totalmente nuevo; para él, ese día nacía una nueva estrella.

Como Gustav Mahler[2], suponemos que Freddie Mercury sentía un gran interés y a su vez miedo por la idea de la anticipación a la muerte y la vida del más allá[3]. Era algo que expresaba constantemente a través de su música, de canciones como “Bohemian Rhapsody” y “Killer Queen”. Esto representa la pulsión de muerte de la que habla Freud y posteriormente Lacan, en la cual existe una tendencia o goce de repetir lo que nos causa malestar. Como enuncia en Bohemian Rhapsody: “Mamá acabo de matar a un hombre”, “Nada ya me importa”. Podemos notar entonces,  que la presencia de la muerte se hace imponente en sus composiciones y en su propia vida.


[1] Salamone, L. D. (2010). Polifonías en Psicoanálisis. Cap. 10. pp. 123. Caracas, Venezuela: Pomaire


[3] Salamone, L. D. (2010). Polifonías en Psicoanálisis. Cap. 10. pp. 122. Caracas, Venezuela: Pomaire.

¿AL BORDE DEL NEUROTICISMO, O INMERSO EN ÉL?

“Una persona neurótica es, simplemente, una persona que sufre, que sufre mucho...Ciertamente, se trata del resultado de un conflicto, generalmente inconsciente, entre los sentimientos que el sujeto siente realmente pero no se atreve a admitir y mostrar, y los sentimientos/conductas que se cree obligado, por la educación recibida y/o las exigencias sociales, a expresar”[1]. A partir de esto, hacemos énfasis en ese goce del que hablaba Lacan: para Freddie el tener pensamientos constantes acerca de la muerte representaba el goce pulsional, ese sentimiento de sufrimiento que viene a satisfacer una pulsión, específicamente la pulsión de muerte, engendrándose una ganancia secundaria.

“I won’t be a rock star, I will be a legend” (No seré una estrella de Rock, seré una leyenda) fueron palabras dichas por Mercury; esta frase resalta el hecho de la muerte, previa a la inmortalidad, entendida como un legado, como una representación de la obra viviente de Freddie Mercury. “…se asegura que es la muerte lo que permite la inmortalidad”[2]; el hecho de luchar contra la muerte y finalmente servirse de ella. Estos aspectos resaltan rasgos neuróticos en nuestro artista, aspectos ocultos de su personalidad que salen a relucir constantemente en sus composiciones musicales. La neurosis vista como un bloqueo, una inmadurez, le permitió a Freddie avanzar a nivel musical y artístico, pero no a nivel personal; siempre preocupado por las ideas negativas que representaba para él, la muerte. "Cuando estoy en el escenario soy muy extrovertido, pero por dentro soy completamente diferente.”[3]. Desde pequeño fue muy tímido y le costaba hacer amigos, algo que no cambió hasta el fin de sus días.


Ahora nos interrogamos, Freddie Mercury: ¿Organizado o no?
“Ok, desorganizado y organizado… Muy desorganizado por momentos, organizado en otros momentos, simplemente soy yo”[4].

Podemos inferir que en esta respuesta, de alguna forma inconsciente, Mercury se refería a su vida personal (desorganizada), y a su vida artística (organizada). Es muy posible claro, que su vida musical haya influido en su vida personal y viceversa, sin embargo, tal parece que él mismo, las mantenía excluidas entre sí, y no tenia problema alguno con eso, al decir: “...simplemente soy yo”.


[1]Cano, J. L. (2008). ¿Qué es un neurótico? El niño bloqueado. Artículos. Recuperado de http://www.psicodinamicajlc.com/articulos/jlc/024.html.

[2]Salamone, L. D. (2010). Polifonías en Psicoanálisis. Cap. 10. pp. 123. Caracas, Venezuela: Pomaire.

[3]Freddie Mercury, Myers 1991.

[4] Freddie Mercury en una entrevista.


¡OH FREDDIECRACIO! ¡QUÉ DECADENTE!


A simple vista Verlaine, Baudelaire, Rimbaud, Oscar Wilde y Freddie Mercury no tienen nada en común, pero ¿qué pasa si indagamos y vamos más allá? Pues nos daríamos cuenta que estos personajes tenían algo en común: una inconformidad con respecto a la sociedad, la forma en la que se manejaba y los parámetros de expresión artística; y es que, ¿por qué tienen que haber límites, parámetros para expresar lo que sentimos? ¿Qué hace una obra hermosa? La respuesta a esta última pregunta dependerá de la perspectiva de cada uno. Henry David Thoreu escribió una vez: “El mundo es mucho más amplio que nuestra percepción del mismo”.

Aunque todo es una cuestión de perspectiva es impresionante como nos podemos encontrar en un punto medio, cómo las palabras nos hacen sentir cerca a una realidad, esto fue lo que hicieron estas personas. No se trata de romper esquemas, sino de crear nuevos. Los decadentes pues, sostuvieron la convicción de que su movimiento no constituía una decadencia en el sentido peyorativo, al contrario, lo suyo era una lucha contra la decadencia literaria existente, una voluntad de renacimiento[1].

“El decadentismo arremete contra la moral y las costumbres burguesas, pretende la evasión de la realidad cotidiana, exalta el heroísmo individual y desdichado, explora las regiones más extremas de la sensibilidad y del inconsciente.” [2]

¿Cómo esto se relaciona a un cantante de una banda de rock? En el hecho de que comparten ideología, aunque Mercury nunca mencionó haber tomado de los decadentistas algo de inspiración, pero podemos decir que ciertamente tomó algo prestado de ellos, en una ocasión afirmó que: “si quiero fumar, fumo y si quiero beber, bebo, y si quiero salir hasta tarde, salgo hasta tarde, así es como funciona”. En el plano de lo moral, se suele asociar la palabra decadencia a una forma de vida sensualista, hedonista, de excesos de diversa índole: en el vestir, en el beber, ¿no es esto lo que pensaba Freddie? Para él la opinión de los demás era insuficiente para cambiar sus métodos, experimentaba constantemente y se dejaba llevar por sus sensaciones, por lo que veía en el cine y en el teatro, tomaba elementos de todas las expresiones y esto fue construyendo el artista que conocemos hoy en día; la búsqueda de un sonido nuevo, de un sonido con el cual las personas pudieran identificarse. Cada objeto tiene así su música, sólo hay que saber extraerla, aunque sea sagrada a nuestro tacto la sentimos[3]. Baudelaire descubrió la correspondencia entre perfumes, sonidos y colores y la tenebrosa y profunda unidad de la naturaleza y uso estos recursos para inspirarse[4]. ¡Qué cosa la inspiración! ¿Cómo vivir de algo que no llega todos los días?

¿No tuvo la misma intención la Pornocracia de Rops[5] que el video de Queen  de la canción Bycicle Race? Para hacer este video se contrataron 65 mujeres para que estuviesen desnudas durante la filmación y se le tomaran fotografías para la carátula del álbum como una respuesta, una reacción al malestar cultural, al malestar de Freddie a ser entrevistado, criticado cuando se vestía de mujer, cuando fumaba y bebía, la inmensa molestia cuando la compañía disquera y la producción decidió cambiar la portada a mujeres con bikini, a reprimir y sublimar una expresión de arte…Nos hace recordar un poco a cómo trataron de silenciar lo expuesto en “La Barca de Medusa” de Gericault obra que pertenece al período romántico.[6]

En la canción “I want to break free” del álbum The Works[7] podemos ver la necesidad de romper con el esquema, de intentar algo nuevo que podría ser mejor:

“I want to break free
I want to break free
I want to break free from your lies
You're so self-satisfied I don't need you
I've got to break free
God knows God knows I want to break free”

Como mencionamos previamente es sólo una cuestión de perspectiva…
“Las mujeres son como las obras de arte moderna. Si tratas de entenderlas, no podrás disfrutarlas” - Freddie Mercury



[1] S.A. Decadentismos. Recuperado el 31 de octubre de 2011 de: http://prosamodernista.com/decadentismo.aspx.
[2] S.A. Decadentismos. Recuperado el 31 de octubre de 2011 de: http://prosamodernista.com/decadentismo.aspx.
[3] Portillo, R. (2010). La voz: objeto pulsional. Polifonías en Psicoanálisis. Caracas, Venezuela: Pomaire.
[4] S.A. Decadentismos. Recuperado el 31 de octubre de 2011 de: http://prosamodernista.com/decadentismo.aspx.
[5] Pornocracia” Felicien Rops.
[6] La Barca de Medusa” Gericault, 1819.
[7] Letra de “I want to break Free” Queen.

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